El camino del tehuelche
Grita, Quetzalcóatl, ruge, aúlla,
que de Oriente vengo a resucitarte,
espérame allá, joven tolteca bravo,
donde se esconde el férreo sol,
la cuna tuya que es
Chichén Itzá, Tenochtitlán, Teotihuacán…
Calafia, Esplandián y su estandarte
que el mío lo traigo pujante y lozano.
Grita, valeroso reptil inmortal
y traga este suspiro
que hacia ti viene rendido.
Inscription à :
Publier les commentaires (Atom)
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire